Para referirse al punto de acuerdo por el que se exhorta a investigar y fincar las responsabilidades por los excesos u omisiones de la autoridad y tomar las medidas de seguridad necesarias para evitar otro evento como el incidente en la discoteca denominada “News Divine”
Legisladores y legisladoras: Miren, el PAN tiene que entender que este no es un asunto de intercambio de escándalos. No sé por qué se indignan más porque hayamos metido un punto de acuerdo con turno a Comisión, donde se analice una solicitud de investigación a fondo sobre los métodos de enseñanza de tortura en el Estado de Guanajuato, donde gobierna el PAN.
No, no son intercambios. Este país no acepta intercambios de escándalo, no debe de aceptarlo.
Tampoco debe de haber juicios prematuros, pero fueron los legisladores del PAN los que han hecho sobre Guanajuato una serie de declaraciones, no hemos sido nosotros, han sido ustedes mismos los que han sentenciado no solamente dicen que entre la policía, que entre la Comisión Nacional de Derechos Humanos a investigar el entrenamiento de los policías de León, no.
Cito algunas frases de ustedes:
Dice el senador por Guanajuato, Francisco Arroyo, que “entre los gobiernos del PAN opera una red de jefes policíacos que van de municipio en municipio panista para implementar prácticas violatorias a los derechos humanos como ésta”. Refiriéndose al adiestramiento de policías en León.
Sigue: “Se ha generado una red muy peligrosa que están fomentando este tipo de prácticas que nos hacen resucitar un paramilitarismo que puede ser fascista, violador de derechos humanos y muy peligroso para la sociedad actual”. Nos recuerda un poco a los escuadrones de la muerte.
Y ustedes mismos han llamado a la investigación a fondo de este caso. Lo que llama la atención en el caso de León y ojala lo miren más allá, porque no están a intercambio los dos asuntos.
Ojala tengamos la mira de lo que tenemos que hacer como política de seguridad en todo el país. No está siendo eficiente, se está criminalizando a los ciudadanos común y corriente.
A veces hay que guardar silencio antes de que las investigaciones concluyan, porque se cometen aberraciones. Ojala se hubiera quedado callado Felipe Calderón, cuando Ernestina Ascencio, la muerte de Ernestina Ascencio estaba siendo investigada. Porque él adelantó que Ernestina había fallecido de una gastritis. Y todos sabemos que en este país, los habitantes de este país en un 60% padecen de gastritis, pero solamente Ernestina tuvo consecuencias fatales, según Felipe Calderón. Ojala se hubiera quedado callado. Ese es el problema.
Y quiero plantear una diferencia. Es un muy grave lo que sucedió en el Distrito Federal, pero no es un caso aislado. El problema es que está ocurriendo en todo el país y el problema es que nos remite a todos los legisladores la perspectiva en cómo estamos condenando y qué estamos condenando y qué vamos a criminalizar, si tenemos ejemplos de condenas entre dirigentes sociales por 67 años de condena a prisión y tenemos narcotraficantes hasta por 4 años de condena de prisión. Eso y que se mueran familias porque se pasaron un retén militar o porque los militares en un operativo en el Estado de Michoacán, con 54 observaciones, y dan cuenta también para que se indignen también las diputadas del PAN sobre estos hechos, dan cuenta que también los militares han violado a jovencitas y además las secuestraron y se las llevaron de su población.
La pregunta es: ¿De veras con la destitución de un titular se resuelve el problema de esta criminalización equivocada, de veras?
No estamos de acuerdo en el PRD, no con quitar una cabeza se resuelve un problema de origen erróneo. Lo que tenemos que replantear es cómo vamos a combatir la inseguridad y qué problemas de origen estamos combatiendo en este país. Ese es el problema real.
Ojala y reine la congruencia en el PAN. Y esta indignación no sea porque aquí presentamos un punto de acuerdo y de resorte de reacción se llame la atención sobre lo que pasó en el Distrito Federal que no dejamos de lamentarlo, solidarizarnos con las familias y que se atiendan además los deudos, como ya lo están haciendo.
No solamente pedimos que se investigue a fondo y que se deslinden responsabilidades, no. Vayamos más a fondo. ¿Qué queremos combatir en este país? ¿Qué delincuencia queremos combatir? ¿Cuál es el tratamiento? ¿Cuál es la política? No es León, que además llama la atención que en el caso de León haya asumido el Presidente Municipal que así lo seguirán haciendo, ese es el problema. ¿Qué repara? No es el corte de una cabeza, es la redimensión de la política en materia de seguridad. Eso es lo que tenemos que estar atendiendo, no solamente con estos exhortos, sino dimensionando lo que nos compete como Poder de la Nación.
Por eso, ojala y los legisladores del PAN puedan ver más allá de lo que hoy a todos nos ha indignado con las políticas de adiestramiento en la policía de León. Con lo que hoy nos ha indignado, como el resultado de un operativo policíaco en el Distrito Federal; con los que nos indignó cuando murió la familia en el Estado de Sinaloa al pasarse un retén militar, con lo que nos indigna que jovencitas han sido secuestradas y violadas en un operativo militar, con lo que nos sigue indignando, que dirigentes sociales de movimientos sociales para reclamar justicia social sean condenados a 67 años de prisión en un exceso que no castiga la delincuencia, sino castiga la movilización social.
Con lo que nos sigue indignando que ciudadanos en el país sean objeto de crímenes, que no tienen como resultado, o no están dando resultado en el combate a la delincuencia organizada, sino está arrojando cada vez más víctimas inocentes.
En esa dimensión trascendamos estas dos malas noticias y convirtamos y vayamos aportándole a la política nacional, elementos que nos permitan la protección, primeramente de los derechos humanos.
Por su atención, muchas gracias. (Aplausos).
